No matar

La asociación portuguesa «Acção Familia» en un comunicado difundido al día siguiente del referéndum sobre la liberalización del aborto que tuvo lugar el domingo pasado en Portugal, comenta que: "Hay que seguir movilizándose para frenar a quienes tratan de imponer a la sociedad una nueva moral». La asociación llama la atención sobre el hecho de que la abstención ha superado el 56% de los que tenían derecho a votar, lo que hace el resultado no vinculante desde el punto de vista jurídico. Tan sólo el 43,6 por ciento de las personas con derecho a voto se presentaron ante las urnas para presentar su opción. El 59,25% votó por el «sí» al aborto, mientras que el «no» fue respaldado por el 40,75%. «Más allá de la consideración jurídica, el elevado índice de abstención verificado denota el desinterés y el malestar de la población frente a esta consulta, así como las serias y graves dudas generadas por el debate sobre el tema», indica el comunicado. Comentaristas y analistas han subrayado también que «la campaña victoriosa del ‘sí’, llevada a cabo por los partidos y los grupos cívicos, ha jugado con doblez». «Sin tener el valor de explicar claramente al electorado» que el «sí» implicaba «una liberalización del aborto hasta la décima semana --hecho que los sondeos mostraban que podía ser objeto de un fuerte rechazo por parte de la población--, han centrado la atención sólo sobre el aspecto, de carácter fuertemente emotivo, de la penalización de las mujeres que practican el aborto». Algunas voces destacadas en el campo del «sí», además, afirmaban que su postura se fundaba en la oposición a la práctica del aborto y su deseo de su disminución en Portugal. Hay que hacer notar, sin embargo, que tras la victoria del «sí», el carácter ideológico ha sido enseguida transformado en uno de los aspectos primordiales de esta victoria y que, pocas horas después de la difusión del resultado, voces favorables al ‘sí’ han empezado enseguida a esbozar peticiones radicales para el marco legal a aprobar. Según la asociación, «la determinación mostrada por el primer ministro y por el Partido Socialista de llevar la cuestión de la liberalización del aborto al Parlamento, a pesar del carácter no vinculante del referéndum, revela el hecho de que la mayoría gubernamental es rehén de una minoría ideológica radical, que a toda costa intenta imponer al país normas legales que proscriben las bases de la moral cristiana de la sociedad». A pesar de todo, «Acção Familia» constata «con alegría y esperanza la gran determinación, el dinamismo y la movilización cívica de las asociaciones y de los grupos que se han empeñado en esta campaña por el ‘no’ a la liberalización del aborto, reflejados en la votación obtenida». La asociación se congratula de modo especial con todos aquellos que han votado ‘no’ «por la lucidez y la determinación que han mantenido, a pesar de la propaganda engañosa desarrollada por los promotores de la liberalización del aborto». Lanza un llamamiento a estas personas «para que sigan movilizándose, ahora más que nunca, para frenar las estratagemas de quienes tratan de imponer a la sociedad una nueva moral». El comunicado concluye afirmando que «Acção Familia» reafirma su propia determinación «a seguir explicando los males morales y físicos de la práctica del aborto libre y luchando, siempre en la legalidad, contra su práctica, que viola el 5º mandamiento de la Ley de Dios: ‘No matar’».