miércoles, 29 de agosto de 2007

OMS, ¿organiza mundialmente la salud?

Expongo a continuación el enérgico comunicado de la Conferencia Episcopal de Guatemala:

Denuncia que la Organización Mundial de la Salud (OMS), con la excusa de la atención post aborto, intenta forzar la legalización del crimen aborto en ese país. Recordamos que la llamada atención post aborto, está incluida en las Metas u Objetivos del Milenio para el Desarrollo de la ONU.
El extenso comunicado comienza citando el manual de la OMS, Aborto sin riesgos, Guía técnica y de políticas para Sistemas de Salud (2003) “cuya finalidad es promover, en los estados miembros, el entrenamiento y equipamiento de los servicios de salud para asegurar que los abortos sean seguros y accesibles”.
Los obispos citan ampliamente el manual, que hace referencia explícita a las Metas u Objetivos del Milenio para el Desarrollo de las Naciones Unidas.
Entre las afirmaciones que recoge el documento episcopal se encuentra la siguiente: “En octubre del 2000, en la cumbre del milenio de las Naciones Unidas, todos los países acordaron sobre la urgencia global de reducir la pobreza y desigualdad. Meta clave es la necesidad de mejorar la salud materna, base importante para el desarrollo, reduciendo los niveles de mortalidad materna en tres cuartas partes entre 1990 y 2015”. (Primer párrafo de la Introducción al manual).
Las Metas u Objetivos del Milenio incluyen el aborto
El segundo párrafo de la introducción de manual de la OMS, no citado por los obispos guatemaltecos dice: “(Las mujeres) mueren porque algunas complicaciones se desarrollan en etapas tempranas del embarazo, a veces aun antes de que la mujer se entere de su embarazo, como por ejemplo en el caso de un embarazo ectópico, y mueren porque buscan interrumpir embarazos no deseados, pero carecen de acceso a los servicios apropiados. Alcanzar la Meta de Desarrollo del Milenio de mejorar la salud materna y reducir la mortalidad requiere acciones en todos estos frentes”. Es decir también conseguir “el aborto legal y seguro.”
Cambiar la legislación
Retomando el hilo del documento episcopal, siguen diciendo los prelados: “Todo lo dicho anteriormente lleva a urgir (por parte de la OMS) que se creen políticas que faciliten el acceso a servicios de aborto sin riesgos en todos los casos en los cuales lo permita la ley así como la creación y facilitación de ambientes políticos que permitan la aprobación del aborto seguro y la eliminación de barreras administrativas y regulatorias existentes”
Citando extensamente la encíclica Evangelium Vitae, los obispos de Guatemala recuerdan que está inscrito en “la ley natural, el valor sagrado de la vida humana desde su inicio hasta su término”; (…) y que “el aborto procurado tiene características que lo vuelven un delito particularmente grave. Sin embargo, la percepción de su gravedad se ha ido debilitando progresivamente en la conciencia de muchos. La aceptación del aborto en la mentalidad, en las costumbres y en la misma ley es señal evidente de una peligrosísima crisis del sentido moral, que es cada vez más incapaz de distinguir entre el bien y el mal, incluso cuando está en juego el derecho fundamental a la vida. El aborto procurado es y será siempre la eliminación deliberada y directa, como quiera que se realice, de un ser humano en la fase inicial de su existencia, que va de la concepción al nacimiento”.
La atención post aborto banaliza el aborto
Por eso la Conferencia Episcopal de Guatemala denuncia: “Desde hace algunos años, el Ministerio de Salud Pública viene promoviendo el Programa Nacional de atención post-aborto, contando para ello incluso con un órgano divulgativo. El mismo tiene por finalidad brindar un conjunto de servicios a la mujer durante el período asociado a su condición clínica que se inicia cuando en forma inevitable se produce la interrupción de un embarazo de veinte semanas o menos, utilizando sistemáticamente la consejería, la técnica de aspiración manual endouterina, el ofrecimiento de métodos anticonceptivos y referencia a otros servicios de salud reproductiva”.
“Para lograr su propósito el Ministerio viene fortaleciendo la red nacional hospitalaria en Guatemala y favoreciendo talleres regionales para mejorar la sensibilización en la atención integral del cuidado post-aborto. Se busca capacitar personal médico y paramédico como enfermeras, enfermeros, promotores de salud y, en algunos casos, comadronas, para poder realizar la aspiración manual al vacío para mujeres en situación de post aborto. El paso de la atención post aborto a la facilitación del aborto inducido mediante la aspiración al vacío, el cual lleva de 3 a 10 minutos de duración y puede realizarse de manera ambulatoria, se dará casi como una consecuencia, aunque no sea una política oficial”.
“Sabemos que en toda Guatemala se vienen provocando abortos inseguros, realizados por personas que carecen de escrúpulos y de entrenamiento necesario y que los llevan a cabo en un ambiente en el que se carece de atención médica mínima. Es por ello que nos preocupa sobremanera el que equipo como el Aspirador Manual Endouterino, conocido como AMEU, esté siendo distribuido y a la vez se capacite para su uso a personal médico y no médico de forma gratuita por el Ministerio de Salud Pública. La reutilización de estos equipos y sus cánulas es muy delicada, ya que pueden utilizarse de nuevo múltiples veces, aumentándose así el riesgo de contaminación con VIH, Hepatitis B, tétanos y gangrena gaseosa, entre otros”.
Por todo lo dicho anteriormente, solicitamos a las autoridades del Gobierno, estudiar a fondo las graves consecuencias que se presentan a raíz de la aplicación del programa de atención post-aborto. Estamos de acuerdo que se debe dar la mejor atención a la mujer que atraviese tal situación, pero no en que se promueva la realización de la aspiración uterina al vacío para luego colocar un dispositivo intrauterino (popularmente conocida como la ”T”) como se promueve por las autoridades de salud. Con tal medida no es está tomando en cuenta que el útero puede haber aumentado hasta cuatro veces su tamaño normal y que sus paredes se encuentran adelgazadas por el reciente embarazo, llegándose a provocar fácilmente con ese dispositivo perforaciones en la pared del útero, provocándose así una situación de mayor riesgo para la paciente. Independientemente de ello, la “T” no puede considerarse como un método anticonceptivo sino abortivo, por lo que nunca podrá la Iglesia aceptar su uso”.
Más sobre las Metas u Objetivos del Milenio
Sólo a vuelo de pájaro y sin tener en cuenta los documentos ya citados en Noticias Globales, hay muchos otros, entre ellos las recomendaciones del CEDAW, en los que se puede ver que los Objetivos del Milenio incluyen contenidos inicuos entre otros los atentados contra la vida humana, por ejemplo:
-OMS, Building stronger health systems key to reaching the health Millennium Development Goals (2005) en el que se afirma que esos objetivos incluyen el acceso universal a la salud sexual y reproductiva (aborto químico, aborto temprano, aborto encubierto).
-OPS, (Organización Panamericana de la Salud): Derogación del Aborto Terapéutico en Nicaragua: Impacto en la Salud (2006). Se afirma que el aborto terapéutico es parte de los Objetivos o Metas del Milenio.
-Fondo para la Población de la ONU, UNFPA and the Millennium Development Goals (2005). Incluye la salud sexual y reproductiva en todas las Metas del Milenio.

Un último comentario mío: la Organización Mundial de la Salud (OMS) ¿no debería cambiar de nombre?, porque no persigue , precisamente, la salud. Más bien la perjudica seriamente.