viernes, 21 de septiembre de 2007

Una retirada no equitativa

No ha durado ni un día el "cómic" que le han hecho a Zapatero sobre sus promesas, comparándolas con vuelos de bajo coste.



Pero,la costumbre de hacer la vista gorda a la ofensa a los sentimientos religiosos a través de muestras y exposiciones, a pesar de ser un delito tipificado como tal en el artículo 525.1 de nuestro Código Penal, está al orden del día. En este caso, no sólo no se ha retirado, sino que en un nuevo caso en Ibiza, - la muestra 'Vamos a Ibiza' -, financiada además con dinero público,



Como siempre, subyace una mera cuestión de respeto al prójimo, que es lo que ordena el ejercicio de la libertad personal. Algo que se olvida pronto, sobre todo si se trata de atacar a la Iglesia. Padecemos a diario el hostigamiento de una ofensiva laicista en auge, apoyada sin tapujos desde el partido en el poder. Para colmo, la muestra ibicenca incumple el convenio por el que el Obispado cedió la iglesia que la ubica al Ayuntamiento, por lo que no se descartan ampliar las medidas legales con este aspecto.