Estimado amigo Juan Luis:
Que Dios y la Virgen te conserven con salud, bienestar y con la alegría que te caracteriza.
Espero que la distancia y el tiempo no te hayan hecho olvidar al suscrito, a quien dirigiste espiritualmente desde que tenía 13 años (ahora tengo 42) en el Centro Tallanes (Piura - Perú), y también, gracias a tus consejos estudié Ingeniería Industrial en la Udep (me titulé y colegié); además de haberme dado trabajo en la Imprenta, entre otras experiencias que nunca olvidaré como los viajes, paseos y tardes de futbol.
El Dr. Antonio Mabres ha tenido la gentileza de facilitarme tu e-mail, ya que ahora yo estoy trabajndo en Lima (Refinería Conchán - Petroperú). Podría, en este primer correo, dedicarme a recordar los buenos momentos mientras estuviste en Piura; sin embargo, expresándote de antemano las disculpas por el atrevimiento, quiero manifestarte brevemente el motivo que me lleva a interrumpir tu tranquilidad (además, claro está, de la satisfacción que me embarga al escribirle a uno de los pocos que se pueden considerar amigos, y tu lo eres desde hace casi ¡30 años!).
Después que salí de la universidad tuve muy buenos trabajos, los cuales me permitieron darle a mi familia ciertas comodidades (me casé y tengo tres hijos: 2 varones - Oscar Josemaría, de 13 años y Daniel Rodrigo, de 3 años y una nena que nacerá en Diciembre si Dios quiere; además, después de Danielito, mi esposa tuvo embarazo anembrionario y perdió el bebé), entre los cuales se encuentra el colegio "Proyecto", donde estudia mi hijo mayor, cuyo costo está por encima del promedio en Piura. Posteriores dificultades de tipo laboral me obligaron a realizar ciertos ajustes en mi presupuesto familiar, exceptuando retirar a mi hijo de dicho colegio, entre otras causas, porque mi hijo ocupa el primer puesto desde 1ro. de primaria (ahora está en 1ro de secundaria), y los promotores de "Proyecto" lo admitieron este año y me dieron como plazo hasta agosto para pagar las pensiones (sólo lo matriculé y he pagado marzo). Seria largo enumerarte la mala racha laborar que me acompañó todo el año 2008 y parte del 2009; sin embargo, con la gracia de Dios desde Julio de este año tengo un buen trabajo en Petroperú acá en Lima, con el sacrificio que ello acarrea al haberme separado temporalmente de mis seres queridos (en un futuro no muy lejano estoy pensando traer a mi familia a Lima).
….
Que Dios y la Virgen estén siempre contigo.
Me despido reiterándote las disculpas del caso por la forma como me he dirigido a ti después de tanto tiempo.
Un gran abrazo.
Oscar Otero Negrón
Cel. 073-969306135
...Que os diré; pues, que me ha emocionado la carta de principio a fin. Este es el pensamiento de una persona que tiene bien cimentada su vida. Vida que no es precisamente la más grata. Llean de sacrificios, dolores, pero con una esperanza y unos cimientos que no socavarán los más inclementes huracanes.
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